Los traductores se han convertido en potentísimas herramientas del Siglo XXI. Gracias a los mismos, podemos entender textos y discursos en otras lenguas que de otra manera sería imposible. Y, como no, Google ha logrado colocar su aplicación como una de las más utilizadas en nuestros días.
Sin embargo, hay que andarse con ojo, ya que no siempre ofrece una traducción fiel o fidedigna al texto original. En muchos casos, estos cambios pueden llegar a ser bastante cómicos.
Los que más se están viendo afectados por este tipo de fallos son los artistas internacionales, que en algunos casos se transforman en palabras bastante insultantes, como Shakira cuyo nombre se traducía -hasta que se corrigió el fallo- por maniática en todos los idiomas del mundo.