MásMóvil no tenía hueco en su proyecto para Pedro Serrahima, el artífice del éxito de Pepephone y tampoco lo ha tenido para Eduardo Taulet, un directivo de luces y sombras pero que fue, indudablemente, responsable del éxito de un cuarto operador que sin él probablemente no habría llegado a consolidarse, mucho menos a tener éxito.
La noticia de su partida la publica Ignacio del Castillo en Expansión. Taulet fue capital para la compra de Yoigo por parte de MásMóvil, ya que en todo momento prefirió la oferta de los amarillos antes que la que presentó la sociedad de inversión británica Zegona, y utilizó sus buenas relaciones con ACS para bloquear la transacción y favorecer la entrada del grupo que hoy dirige Meinrad Spenger.
Entre los logros de Taulet destacan dos. El primero se produjo nada más entrar. Cuando llegó como director de marketing y ventas en 2008, Yoigo estaba muy necesitada. La compañía, entonces dirigida por Johann Andsjö, había demostrado su incapacidad para cumplir con los planes de negocio ciñéndose sólo a las ventas a través de internet. Era buena idea, pero llegó a este mercado demasiado pronto.
Los logros de Taulet
Taulet cogió los pedazos del canal que Orange había despreciado y consiguió crear una cadena de tiendas que vendió mucho y bien los productos de la compañía que por aquel entonces decía la verdad, verdadera.
Su segundo gran éxito fueron las tarifas Sin Fin, tarifas con muchos datos, las primeras asequibles con 20GB, que cuando salían por debajo de 30€ se comían el mercado.
En los últimos años su situación al frente de la compañía fue muy complicada. En primer lugar, porque estaba claro que Telia iba a vender tarde o temprano, de manera que su gestión siempre chocaba con problemas cortoplacistas relacionados con poner en forma la compañía para una posible venta.
En segundo lugar, porque él tenía un plan para la empresa que no pudo llevar a cabo: Aumentar la red drásticamente mejorando el convenio con Ericsson y pasar de un acuerdo mayorista con Movistar a otro con Vodafone, aunque fuese sólo en 3G. Como iban a entrar más antenas, era menos grave.
Taulet, que parecía haberse quedado como asesor en la compañía, habría dejado el grupo en una situación complicada. Aunque MásMóvil tiene buenas perspectivas bursátiles, está por ver que tenga la misma capacidad para vender que tuvo en sus mejores momentos.
Las sombras de Taulet
Entre las sombras de Taulet, destacan dos que se puedan probar. La primera, la pérdida de confianza por parte de pequeños dueños de tiendas que sufrieron mucho durante la última fase de su dirección y a los que la compañía daba poca solución. La segunda, su enemistad forjada a fuego con Movistar y Pepephone tras una polémica a tres bandas que aún está en los juzgados.
En todo caso, es justo decir que Yoigo probablemente no existiría sin Taulet. Del mismo modo que cabe preguntarse qué va a pasar con esa compañía una vez que han desaparecido de la escena los CEOs que habían demostrado que sabían vender. Ahora sólo quedan los que han demostrado que saben cerrar operaciones y un montón de directivos llegados de Jazztel y Vodafone.
Los resultados de MásMóvil en los próximos meses, con situaciones tan enrevesadas como los cambios engañosos en las condiciones de los contratos de sus clientes, el fracaso a la hora de cerrar un único acuerdo mayorista satisfactorio, que se saldó con el pago a dos proveedores distintos a precio de oro (Orange y Movistar) y los problemas con ZTE como proveedor de red que duró apenas unos meses y que tuvo que sustituir por Huawei, van a ser claves para su futuro.