El Mobile World Congress de 2017 ha empezado tirando a gris. Es cierto que Huawei ha reemplazado a Samsung como gran fabricante en presentar en un evento propio su nuevo dispositivo de bandera, y que las cosas han transcurrido de manera similar a otros años. Pero entre los periodistas acreditados cunde el desánimo. Sí, se están presentando cosas y no falta hacia donde mirar, pero el año pasado nos divertimos mucho más.
Recordemos que el año pasado fue en el que Mark Zuckerberg se nos coló a los periodistas por el pasillo con mirada socarron mientras mirábamos con nuestras gafas de realidad aumentadas, o el año en el que LG se presentaba con un insólito móvil modular… En la jornada previa del #MWC17 de 2017 lo más interesante casi fue la presentación de Aura, la cuarta plataforma de Telefónica. Y que un operador sea más divertido que un fabricante es una mala señal.
Pero teléfonos no faltan, vamos a hacer un pequeño repaso a qué nos ha deparado hasta ahora la feria en cuanto a chismes propiamente dichos.
4Nokia 3110, un truco de marketing barato
A la vista de lo que estamos viendo en el Mobile World Congress, parece que el acuerdo de Nokia y los chinos de HMD esté limitado por ahora a la gama media-baja y al aprovechamiento del márketing de la nostalgia. Si lo mejor que puede ofrecer la industria es una revisión de un teléfono carpetovetónico sin WhatsApp y que cuesta 50 dólares, apañados vamos. Que en 2017 la gente todavía considere un servicio de valor añadido el jueguecito de las serpientes y el Nokia Tune no dice nada bueno.
Luditas, hipsters, nostálgicos y narcotraficantes (que sólo compran móviles de usar y tirar) estarán encantados con el nuevo dispositivo, al que le dura un mes la batería básicamente porque no puedes hacer nada con él.