Quizá la Nintendo Switch no le llegue a la suela de los zapatos a la PlayStation o a la Xbox, especialmente si las comparamos con las futuras PlayStation 4 Pro o el Proyecto Scorpio de Xbox, pero por la arquitectura informática que incorpora, más parecida a la de una tablet, quizá suponga una ruptura similar a la que el iPad supuso para el mundo de la informática.
Un interesante análisis de Jared Newman para Fast Company pone en su sitio la importancia de la potencia cruda y nos recuerda que, en el momento de su aparición, el iPad era un dispositivo increíblemente torpe en comparación con cualquier PC. No soportaba siquiera multitarea y las páginas web de la época estaban plagadas de Flash que el dispositivo de la manzana mordida era incapaz de interpretar. Básicamente, era imposible trabajar en una, e incluso hoy es complicado salvo para ciertas tareas.
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Sin embargo, triunfó, su arquitectura ARM se impuso en el mundo de las tabletas y generó una nueva categoría de consumo. ¿Puede hacer lo mismo la Switch? La nueva consola de Nintendo, que saldrá a la venta en marzo de 2017, utilizará un procesador Tegra X1 con arquitectura X1 bastante similar al de los teléfonos inteligentes y permitirá llevar los juegos a la calle y hacer que mucha gente pueda incluso compartir la experiencia en su pequeña pantalla.
Como ya pasó con la Wii, con su mando en forma de palo, y con la Wii U a continuación, con su minitableta, la apuesta de Nintendo pasa por acercar su experiencia de juego a mucha gente que hoy en día no está jugando, no tanto contentar a quienes sí lo están haciendo. En una entrevista con merca2.es, los creadores de la consola portátil española Smach Z destacaban orgullosos que su principal diferencia con Nintendo es que ellos sí atacan al llamado hardcore gamer, el geek súper exigente que no se conforma con poco. “Nintendo no juega a eso”, subrayaban.
El problema de Nintendo, con su nueva consola basada en ARM y aspecto de perrito triste, es que no está claro que haya tanta gente, aparte de los muy jugones o los niños, interesados en gastar tanto tiempo y dinero en videojuegos. Para colmo, el éxito de Pokemon Go en el móvil demuestra el éxito masivo que se puede tener en dispostivos que, cada vez más, suman una enorme potencia computacional. Otros juegos para móviles, como The Trail, demuestran que muchas veces basta con eso y mucha imaginación para atraerse a los preciados jugadores casuales.
Quizá es que hasta ahora no habíamos visto el chip preciso capaz de integrar el mundo de la movilidad y el de los videojuegos, dado que Tegra ha tenido que cuidar el mundo de los gráficos mucho antes que ningún fabricante de un sistema en un chip (SoC) para móviles.
Quizá Nintendo Switch sí suponga ese cambio de paradigma. ¿Se quedarán Microsoft y Sony compitiendo en el mundo de las “consolas como un PC” mientras Nintendo arrasa en las “consolas como un iPad”? ¿Vosotros qué creéis? Podéis compartir vuestras impresiones en el Twitter de @merca2_es o en el mío propio. Soy @uriondo.
