Hace unos años las aerolíneas intentaban agradar a algunos pasajeros con los llamados ‘up grades’, cambiar de categoría para intentar compensar molestias o, simplemente, porque así evitaban problemas a la hora de la facturación si había sobreventa. Sin embargo, esta práctica cada vez es menos habitual. Aun así todavía hay algunos resquicios para aprovecharse de ellas y lograr que nos metan en Business habiendo pagado la clase turista.
5Ve correctamente vestido y sé educado
El aspecto siempre es importante. Se presupone que si viajas en Business sabes comportarte y no vas a dar la nota. Por eso es vital que no vayas en chandal y zapatillas de andar por casa. Ponte el pantalón con pinzas o un vaquero y una camisa ¡y a volar! Según el portal Trabber, si haces esto, las posibilidades de que seas el agraciado aumentan en un 50%.
Lo mismo ocurre con la educación. Si llegas al mostrador con malos modos, seguramente saldrás perdiendo. No quiere decir que no vayan a llegar tus maletas al destino, pero probablemente si alguien tiene que quedarse sin asiento, seas tú.