Exceltur deja clara su tajante oposición a reducir la jornada laboral y se posiciona a favor de la CEOE

El sector turístico español se enfrenta a una amenaza inminente con la posible aplicación de la reducción de la jornada laboral a un máximo de 37,5 horas semanales en 2025. Esta medida, respaldada por el Ministerio de Trabajo, ha generado una «honda preocupación» y «rotundo rechazo» por parte de Exceltur, la principal alianza turística del país.

Ante esta situación, es imperativo analizar en profundidad las implicaciones que tendría esta propuesta para el futuro del turismo en España. El sector turístico presenta una serie de características que lo diferencian de otros sectores económicos. La mayoría de los servicios turísticos son presencialistas, lo que significa que requieren la presencia física de trabajadores para prestar sus servicios en los momentos en los que los clientes los disfrutan.

Esto implica que las ganancias en productividad no se pueden alcanzar mediante un uso más eficiente del tiempo de trabajo. Además, la estructura empresarial del sector se caracteriza por un alto porcentaje de micro pymes, lo que dificulta la capacidad de adaptación a cambios en la jornada laboral.

El Impacto Económico de la Reducción de Jornada

Según los cálculos de Exceltur, la implementación de esta medida supondría un coste de 2.348 millones de euros al año para las empresas turísticas. Esto se debería a la necesidad de suplir las horas reducidas en las posiciones donde no es posible hacer un uso más eficiente del tiempo de trabajo. Además, se estima que las horas semanales trabajadas se reducirían en 5,7 millones, de las cuales el 75,4% no pueden compensarse mediante un uso más eficiente del tiempo.

La reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales supondría un golpe devastador para la competitividad y rentabilidad del sector turístico español, poniendo en riesgo la recuperación del turismo tras la crisis de la COVID-19. Por ello, Exceltur hace un llamamiento al Ministerio de Trabajo para replantear su posición y confiar en la negociación colectiva como la mejor vía para avanzar en la mejora de las condiciones laborales del sector.

Consecuencias para las Empresas Turísticas

El impacto de esta medida sería particularmente duro para las pymes y los sectores de la restauración y el transporte de pasajeros por carretera. Según los cálculos de Exceltur, los costes laborales totales sufrirían un incremento medio del 4,9% para las empresas turísticas, lo que se traduciría en una reducción media del 8,1% de sus beneficios anuales.

Por subsectores, el impacto económico se concentraría en las empresas de la rama de restauración, con 1.029 millones de euros y una reducción del 19,1% de los beneficios empresariales; en el transporte, con 599,7 millones y un descenso del 7,8% de los beneficios; y en el alojamiento, con 403 millones de euros y una caída del 6,1% de los beneficios.